La creatividad es un regalo.
Puede ayudarte a resolver problemas, alcanzar metas y atravesar el aburrimiento sin mucho esfuerzo.
La mayoría del tiempo, juega a tu favor.
¿Pero qué pasa cuando no?
Cuando las ideas llegan más rápido de lo que puedes actuar sobre ellas.
Cuando todo parece posible, pero nada se siente claro.
Todos hemos estado ahí.
Te congela. Sientes la presión de elegir bien. Y esa pregunta silenciosa se cuela: ¿y si elijo mal?
El companion de esta semana ancla en ese momento. Cuando hay demasiado por hacer y no suficiente claridad sobre por dónde empezar.
Espero que lo que encuentres dentro te ayude a elegir las acciones que importan y volver a ellas por las razones correctas.
⚡ Recap: De perseguir a elegir
A veces creemos que el problema es el agotamiento, cuando en realidad es la fragmentación.
No estamos cansados por hacer demasiado. Estamos agotados por cargar demasiados futuros posibles a la vez.
Decimos que sí a todo lo que nos importa. Y funciona… hasta que no.
Siempre hay otra versión de ti que parece estar un paso adelante. Otra persona haciendo más. Otro camino que parece ser el que finalmente te va a dar libertad.
Pero la respuesta no es hacerlo todo.
Es elegir lo que importa ahora y estar dispuesto a dejar que lo demás espere.
Keep reading with a 7-day free trial
Subscribe to Self Disciplined to keep reading this post and get 7 days of free access to the full post archives.